Charlamos con Ricardo, impulsor del proyecto, sobre cómo surgió esta iniciativa, qué necesidades cubre y qué impacto quiere tener en la vida cultural de las personas con discapacidad.
Un proyecto que nace de la experiencia..y de la exclusión
Todo comenzó en 2019, cuando Adolfo Conesa, entonces presidente de CODIFIVA (la Coordinadora de Personas con Discapacidad Física de la Comunitat Valenciana), contactó con Ricardo para proponerle un reto: diseñar un proyecto que diera soluciones reales a los obstáculos que impiden que muchas personas con discapacidad disfruten plenamente de la cultura.
La motivación no era teórica. Ricardo, amante del cine, la música y el arte, ha vivido en primera persona esas barreras invisibles (a veces, muy visibles) que alejan a muchas personas de la vida cultural: entradas imposibles de conseguir, espacios mal señalizados, falta de transporte accesible, precios poco equitativos… Una suma de obstáculos que, en lugar de invitar a participar, desalientan.
“Malas experiencias previas y situaciones de discriminación me han ido alejando de los eventos culturales. Por ejemplo, comprar una entrada y no recibir la misma experiencia que el público general”. Esta vivencia, por desgracia, no es solo mía: dos de cada tres personas con discapacidad no participan nunca en actividades culturales, según el informe Olivenza”, explica Ricardo.
¿Qué hace cultura es vida?
Esta guía es una herramienta para que todas las personas, independientemente de su situación, puedan planificar su experiencia cultural sin sobresaltos ni sorpresas.
Es precisamente este enfoque lo que diferencia al proyecto: lejos de etiquetar lugares como accesibles, describe con precisión las características de cada espacio: cómo son los accesos, si hay aseos adaptados, si hay ascensores y cómo funcionan, si el aparcamiento es adecuado, si la compra de entradas online contempla necesidades específicas.
En total, más de 700 aspectos pueden recogerse en una sola ficha digital. Todo ello gracias a una tecnología desarrollada a medida y un equipo con experiencia directa en accesibilidad. “Somos nosotros quienes hacemos el trabajo, con conocimiento de causa. No delegamos en terceros que no conocen la realidad que vivimos”.
Una guía pensada para todos
Aunque el proyecto nació centrado en la accesibilidad para personas con movilidad reducida, ha ido ampliando su enfoque para incluir necesidades sensoriales, cognitivas u orgánicas. Porque la accesibilidad no es solo cosa de unas pocas personas: todos, en algún momento de nuestras vidas, podemos necesitarla.
Desde mujeres embarazadas hasta personas con una lesión temporal, pasando por quienes envejecen, que –si tenemos suerte– seremos todos.
Una web práctica, clara y útil
El corazón del proyecto es su web, donde cualquier persona interesada puede consultar las condiciones de accesibilidad de espacios y eventos culturales en la Comunitat Valenciana.
La web permite buscar por centro, evento o ubicación y ofrece una ficha detallada dividida en ocho grandes bloques: desde cómo llegar hasta cómo es el interior del recinto, pasando por cómo comprar las entradas o qué servicios adicionales existen.
Todo acompañado de fotografías y explicaciones técnicas claras, para que el público pueda tomar decisiones informadas y prepararse para disfrutar del evento con tranquilidad.
La cultura es mejor cuando es de todos
Además de informar, la guía quiere escuchar. Por eso, incluye una sección participativa donde cualquier persona puede compartir experiencias, sugerencias o necesidades específicas. La idea es que esta guía crezca y evolucione con quienes la usan.
Y no solo está pensada para quienes tienen una movilidad reducida, porque quienes la tienen van al teatro o a un concierto con amigos o familiares. Si uno de ellos necesita condiciones específicas, la información que ofrece esta guía puede marcar la diferencia entre ir o quedarse en casa.
El reto de crecer... y el poder de colaborar
Tras su arranque en el programa Valencia Missions 2030 y con el apoyo de instituciones como la Generalitat Valenciana y el Gobierno de España, el proyecto se encuentra ahora en una fase clave: crecer.
Eso implica incorporar nuevos centros culturales, ampliar el equipo humano y encontrar financiación que permita mantener y mejorar el servicio a largo plazo. Porque lo que está en juego es más que un proyecto tecnológico: es una herramienta para una sociedad más justa e inclusiva.
¿Y tú? ¿Conoces Cultura es Vida?
Si tienes una discapacidad o limitaciones de movimiento, esta guía puede ayudarte a reconectar con la cultura. Si formas parte de una institución cultural, puede ayudarte a comprender y mejorar tu relación con el público.
Como dice Ricardo: “No te quedes en casa por dudas o miedos. Cultura es vida está aquí para acompañarte, para abrir puertas, y para que todas las personas podamos vivir la cultura con igualdad y dignidad”.